Presidente de la junta directiva
Como presidente de la Fundación Paul-Gérin-Lajoie con un MBA de economía, François Gérin-Lajoie, tiene más de 40 años de experiencia trabajando como un experto en finanzas, marketing internacional y cooperación internacional. A través de un período de más de 20 años, estuvo implicado en la esfera de la educación como director de una empresa editoral educativa, para la cual ha creado asociaciones Africano-Canadiense en cinco países africanos (Guinea, Mali, Senegal, Burkina Faso y Costa de Marfil). En el mismo tiempo, fue presidente de la Asociación Quebequense de los organismos de cooperación internacional (Association Québécoise des organismes de coopération internationale – AQOCI). Luego fue presidente voluntario en Canadá para la Fundación Canadiense para la investigación de las Enfermedades de la infancia. Desde 1977, esta recaudo más de $50 millones para equipos de investigación pediátrica en cuatros hospitales de Quebec.
En 1994, se adjuntó al equipo de Paul-Gérin-Lajoie, una organización no gubernamental. Esta ONG es dedicada a proveer acceso a la educación básica y formación a niños y jóvenes en países poco privilegiados. La fundación también trabaja para educar a niños del nivel primario en Canadá sobre realidades internacionales. Fue nombrado presidente de la fundación Paul-Gérin-Lajoie en Junio del año 2006. Como empresario, dirigió y llevó a cabo con éxito varios asociaciones, creación de empresas y intercambios comerciales centre el Norte y el Sur con principales organizaciones y empresas internacionales. También facilita la transferencia de tecnología y de programas de desarrollo para países con bajos recursos.
a quality education for all serving the eradication of poverty and the safeguarding of our planet.
Como miembro de la junta directiva del centro universitario Paul-Gérin-Lajoie y inspirado por la obra pionera y magistral de su padre Paul Gérin-Lajoie, François es encantado de haberse convertido en el primero presidente de la organización sin fines de lucro Idea educación empresarial. Su padre y él comparten la convicción que « la escuela comunitaria empresarial (ECE) es la continuación lógica y natural de las reformas de los sesenta ». Convencidos que esta escuela del siglo 21 es concretamente y realmente adaptada a su tiempo, la ECE representa para ellos una respuesta a los objetivos 2030 de las Naciones Unidas : una educación de cualidad para todos al servicio de la reducción de la pobreza y la salvaguardia del planeta.
